Santo Domingo. El doctor Juan B. Guerreo Ávila Vicerrector de Asuntos Internacionales de la Universidad Nacional Evangélica UNEV, puso en circulación el segundo tomo de su obra titulada “Don Gregorio”, en un acto celebrado en el Fórum Pedro Mir de la Librería Cuesta, en el Distrito Nacional.
La presentación de la obra estuvo a cargo del profesor de teología Alfredo Osser Veras de la Universidad Nacional Evangélica (UNEV) y contó con la presencia del rector de la UNEV, doctor Wilfredo Mañón Rossi, el cual felicitó al doctor Guerrero Ávila, al tiempo que motivó a otros a profesionales de la entidad escribir libros como forma de dejar un legado a las presentes y futuras generaciones.
El libro, de rápida y fácil lectura, que ya está disponible en la Librería Cuesta, enaltece la resistencia campesina a la invasión norteamericana de 1916.
La obra analiza a profundidad la primera ocupación estadounidense a República Dominicana que se produjo entre 1916 y 1924, y busca rescatar algunos de los nombres de aquellos hombres y mujeres que formaron el movimiento “los Gavilleros” que operaban desde la región Este de isla.
Estaban conformados, en gran medida, por campesinos que habían sido despojados de sus tierras durante el apogeo de la industria azucarera de gran capital extranjero, iniciado a finales del siglo XIX e incentivado en los primeros quince años del siglo XX.
El autor Guerrero Ávila, señaló que estos grupos también llamados “los del monte” o los “alzados” venían operando desde 1904, aunque para entonces a muchos de sus líderes no se les conocieran intenciones patrióticas como el caso quizás de Salustiano Goicochea.
Señala el escritor que los grupos de Gavilleros se caracterizaban por estar conformado por familiares y precisamente ese es el escenario que en 215 páginas plantea el autor, teniendo como centro la historia de la familia de don Gregorio, donde se dieron serios conflictos por asuntos económicos.
La invocación para dar el inicio al acto fue hecha por el pastor José Montero, capellán de la UNEV. Mientras que el profesor Homero Rodríguez, tuvo bajo su responsabilidad la lectura de la semblanza del autor.
A la actividad asistieron profesores, académicos, amigos, y pastores de diferentes confesiones de fe cristiana los cuales adquirieron la nueva obra la cual era autografiada por el autor.