Bendiciones para todos:
Queremos hacerles llegar nuestras más sinceras felicitaciones en el día del trabajo. Gracias a Dios y al esfuerzo de ustedes nuestros sueños se pueden hacer realidad, en beneficio de los mejores intereses de la academia y la extensión del Reino de Dios en la tierra.
Tenemos como ejemplo de trabajo a nuestro Dios el cual está siempre trabajando de manera activa, dirigiendo la historia, obrando en la redención del hombre de un mundo perdido integrando a su seguidores y como lo establece San Pablo en 2 Cor. 5:17-20.
Dios está obrando en el mundo, y aún sigue obrando. A causa de su amor quiere que tengamos el privilegio de trabajar con él como embajadores. No obstante, es Dios el que está presente para hacer su obra por medio de nosotros.
El 1° de Mayo se conmemora, en todo el mundo, el Día del Trabajador, que recuerda a los obreros ejecutados en 1887, tras el reclamo de reivindicaciones laborales. Conmemorar el Día del Trabajador tiene un significado especial porque recuerda una jornada de lucha histórica de los trabajadores en busca de lograr condiciones de vida y de trabajo dignas.
El trabajo enaltece a los seres humanos, por eso felicito tanto a los hombres y mujeres que se dedican a labores productivas y académicas que elevan su condición familiar e individual, a la vez que se constituyen en pilares del progreso de sus espacios de servicio y, a la postre, en forjadores del amplio desarrollo de nuestra academia a la que todos aspiramos.
Felicidades a todos nuestros héroes y trabajadores.
Dr. Wilfredo Mañón Rossi, Rector.